Recientemente el entrenador de un equipo de fútbol de la primera división española utilizó un video que circula por la red desde hace años como elemento de motivación para sus jugadores. Tras su visionado, este equipo encadenó varios resultados positivos que les permitieron salir de los puestos de descenso y ahora mismo se encuentran a punto de conseguir la ansiada permanencia. Parece que el video obró el milagro.
Es posible que en estos momentos os estéis preguntando que vieron estos jugadores que les llevó a incrementar su motivación y esfuerzo, ¿era el video que empleó Guardiola el año pasado basándose en la película Gladiator?, ¿o un montaje con las mejores jugadas de cada uno de los miembros de ese quipo?. Ninguna de estas opciones, el video es mucho más inspirador, conmovedor, profundo, motivador, impresionante, vibrante y emocionante. Personalmente es uno de los videos más increíbles que he visto en los últimos años, sobre todo si tenemos en cuenta que está basado en una historia real.
El video cuenta la historia de Dick Hoyt, un ex militar estadounidense, que junto a su hijo Rick protagonizan una de las demostraciones de superación más increíbles. Rick nació con parálisis cerebral, lo que le impide hablar, andar, moverse libremente y coordinar de manera adecuada las manos y brazos. Se comunica a través de un programa informático especial que interpreta los movimientos de la cabeza y los traduce en palabras con las que construye frases. Sus padres nunca renunciaron a que su hijo, a pesar de la discapacidad, tuviera un papel activo y autónomo en la vida, a pesar de que los médicos les indicaron que se mantendría en estado vegetal toda la vida.
Dick se dio cuenta un día que a su hijo le encantaban los deportes, por lo que para ayudarle decidió embarcarse con él en una emocionante aventura donde la fuerza del amor de un padre hacia su hijo fue capaz de superar todas las adversidades y conseguir lo que aparentemente era imposible. Conocidos como el “Equipo Hoyt”, Dick y Rick han participado en más de mil competiciones (incluidas pruebas Ironman, las más duras que existen), siendo el padre quién lleva a su hijo en carrito como si fuera un bebé. Es sorprendente ver como un hombre que ahora tiene casi 70 años, lleva a su hijo de 47 años en estas exigentes competiciones y culmina con él las pruebas. ¿De dónde saca fuerzas y energía Rick?.
Si ves el video entenderás que “botón” tocó este video en los deportistas que lo vieron. La historia de motivación, amor y sobreesfuerzo que representa el Equipo Hoyt nos debe hacer pensar que hay retos que parecen insuperables pero si encontramos aquello que realmente nos motiva e inspira, nada es imposible.